::... Honramos a las generaciones y vivimos el contacto con la memoria antigua de nuestros pueblos ...::

jueves, 27 de febrero de 2014

El canto y su infinito compartido

 
El universo esta siendo creado en este mismo momento desde el canto de una mujer. Su coro son las estrellas y su destino el sol.

Los cantos son y serán una herramienta maravillosa para relacionarnos con la divinidad y desde nuestras posibilidades como interpretes queremos que esta conversación sagrada se manifieste desde la originalidad, la frescura, y la herencia de nuestras tradiciones.

Diseño: Ana Capicua
Postal a la venta para apoyar el proyecto
Encontrar una manera adecuada de cantar no es nuestro objetivo, pero encontrar la manera original de hacerlo sí. En este encuentro descubrimos que se puede hacer desde la colectividad, sin anular o hacer de lado a ninguna forma de canto.
Se nos ha dicho que debemos mantener los cantos como nos los pasan de generación en generación, pero también hemos descubierto que interpretamos siempre los cantos con nuestro toque personal... desde lo que somos. 

Parte de nuestro trabajo como interpretes es crear y recrear las melodías del universo de acuerdo a la armonía de nuestro propio corazón y por ello, soy muy feliz de descubrir que disfruto todas las maneras de manifestar los cantos heredados y elevados. Descubro belleza en las formas distintas y diversas de interpretar un canto, me siento feliz conmigo misma por no tener una forma predeterminada de entender la melodía del corazón.

Quiero encontrar las miles de formas que tiene un canto, disfrutarlas y regocijarme de ese canto, de la misma manera en como la interpretamos nosotros.  Así, liberándonos de nuestro ego donde nuestra forma de cantar es la única o la adecuada; nos abrimos a entender y comprender que la nuestra, es eso: nuestra.

Imagen de temazcal
Abriéndonos a escuchar las otras maneras aprendemos a acompañar a nuestros hermanas y hermanas. Porque un canto tendrá muchas maneras de interpretarse pero un sólo objetivo: dejar plasmado el mensaje del amor para las futuras generaciones y dejar marcado el camino certero de la vibración que nos guía al corazón.

Abrámonos al aprendizaje continuo y a la belleza de todo el tiempo y el espacio. recordando que no es un trabajo fácil des-estructurar lo aprendido.

Por eso existe Mujeres de luna para compartir todas las formas que hemos ido encontrando en el camino de los cantos y así, re-conocer las diversas perspectivas que un canto construye en cada ser, en cada intérprete.

Invitándolas a este interminable mundo del aprendizaje de cantos sagrados donde honramos a las generaciones femeninas a través de nuestra interpretación de la herencia, las invitamos.
Por todas mis relaciones.

Texto por Paulina Fernanda Oviedo Rodríguez .:. Quilla Pakari  (Luna del amanecer) .:. Tsunki Noa (Guardiana de las aguas dulces) Nací en Cuenca-Ecuador el 16 de septiembre de 1983 y viviendo en México aprendí de la tierra, el agua, el fuego y el aire. Me gusta cantarle a la vida, al amor y despertar la memoria sagrada en mi camino. Soy feliz siendo compañera y madre, caminando en la tierra con mi familia de una manera sagrada.

viernes, 21 de febrero de 2014

Diotima Ra - Catalina Pérez




"La vibración de cantos uitoto, mexica, diné y lakota despertaron una energía que estaba dormida..."


Nacida en Colombia. Mujer en sus 30, seguidora de tradiciones ancestrales de América desde hace 4 años. Sensible a los saberes sobre la luna de la mujer, uso copa lunar y siembro mi luna desde hace 3 años; ahora, gestante, hago pagamentos a Dachiname (Madre Tierra), según me han enseñado padrinos mexicas, muiscas, emberas y arhuacos. Reconozco en la palabra escrita y hablada uno de mis dones, puestos al servicio de mi abundancia y de la curación de familiares y amigos. La palabra cantada es una nueva dimensión por descubrir, a partir de la calidez de mi vientre, como dijo una abuela mestiza seguidora de muiscas y saberes hinduístas.

Mi despertar a la conciencia comenzó en un círculo de cantos que se hizo donde yo trabajaba (un museo). La vibración de cantos uitoto, mexica, diné y lakota despertaron una energía que estaba dormida; me condujeron a ceremonias de plantas sagradas y aunque intenté cantar, no lo lograba, por timidez y por falta de entrenamiento. Desde hace unos 6 meses mi canto ha mejorado, y aun más hace un mes y medio, desde que estoy gestando.

No he ido a muchos círculos de mujeres, por mis muchas ocupaciones y porque donde vivo no se hacen mucho. En los pocos en los que he estado me he sentido feliz. Disfruté de uno muy especial hace dos años, dirigido por una abuela emberá y una psicóloga que vive en el Putumayo, selva colombiana; recuerdo otro donde hablamos del huevo de obsidiana; y celebro los almuerzos con mi amiga Sándalo, que aunque son de dos personas, son todos unos círculos de mujeres.
mis dones, puestos al servicio de mi abundancia y de la curación de familiares y amigos. La palabra cantada es una nueva dimensión por descubrir, a partir de la calidez de mi vientre, como dijo una abuela mestiza seguidora de muiscas y saberes hinduístas.


jueves, 20 de febrero de 2014

Julia Torquatti

 

"Expresar la belleza y la suavidad del femenino así como toda la fuerza de mi útero que sale a través de mi garganta"


Nací en el sur de Argentina y crecí rodeada de naturaleza. Cuando era todavía una niña empecé a ir a la iglesia los domingos porque me atraía la parte de los cantos, no entendía nada del sermón, no entendía nada del pecado, pero en los cantos, cuando cantábamos todos juntos vibraba mi corazón. Tenía un piano de juguete en el que tocaba las melodías y cantaba. En ese momento de mi vida descubrí también el poder del rezo, de la conexión íntima, pura y directa entre diosito y mi alma de niña a través de la palabra.

Más tarde descubrí la poesía y también encontré en esta la misma sensación, que llegaba a mi corazón cuando leía y que salía de mi corazón cuando escribía. Volví a conectar con el canto devocional cuando empecé a practicar yoga y a cantar los mantras. Aunque no entendiera el significado de las palabras, mi espíritu reconocía y se reconfortaba en esta vibración de canto sagrado.

Cuando llegué a México hace 7 años conocí las ceremonias y el círculo de mujeres, mis comadres cantaban tan bonito, y cantaban mucho. En México descubrí la fuerza y la belleza de la energía femenina y me fui identificando poco a poco y cada vez más con este camino. En el canto encontré la manera de expresar la belleza y la suavidad del femenino así como toda la fuerza de mi útero que sale a través de mi garganta, una vibración que sale del corazón y llega a los corazones de todos, una vibración que unifica.

sábado, 15 de febrero de 2014

Iris Sayri Saranágati

"...me permite sanar y cerrar otros círculos en mi vida, me ubica y me impulsa a la vida, redescubriéndome en mi luz y mi oscuridad..."


Soy Iris, soy Saranágati, soy Sayri, soy todos los nombres que ha tenido mi alma y todos los que tendrá. Soy el silencio, la voz callada que comienza a despertar de su letargo. Hija de Beatriz y Jorge. Mamá de Quilla. Nací en la hermosa provincia de Córdoba Argentina. Me gusta escuchar la risa de mi hija, el sonido mas bello que ha tocado mi corazón. Trabajo con medicina holística, amo, agradezco y honro mi profesión que me permite conocer la naturaleza humana, sanarme un poco más en cada terapia que realizo y ponerme al servicio de mis hermanos. Los cantos de medicina me conectaron con la vida, ellos fueron y van sanándome en el camino. Re unirme entre mujeres es ir armando el rompecabezas de mi ser, en cada una me reflejo, me observo y voy sanando . Re unirme entre mujeres es sanar mi energía femenina, es regalarle a mi hija una mamá feliz y plena. Con mujeres de luna vivo el amor el servicio y el apoyo de mis hermanas compañeras. Es este círculo el que me permite sanar y cerrar otros círculos en mi vida, me ubica y me impulsa a la vida, redescubriéndome en mi luz y mi oscuridad.

jueves, 13 de febrero de 2014

Ana María Forero Cruz

"Cuando llego la medicina de la tierra a mi ser, asumí el canto para rememorar, honrar y agradecer al Gran Espíritu por la vida y seguir cantando para sanar "


Mi padre me dio el nombre  de mi Abuela  Ana María. Nací en Belén Boyacá, Colombia un diciembre de 1981. Mis padres redescubriéndose así mismos con mi niñez y con la expresión, pintaban, tejían el bronce y participaban en la rebeldía colombiana de los 80. Desde siempre un juego habitual de mi mamá era cantar para mí, con un cepillo de peinar el cabello y crear un ambiente de espectáculo  donde yo era el público emocionado siempre dispuesta y con aplausos.

Sus cantos variaban según su estado de ánimo y aunque no eran muy infantiles, fueron un viaje al interior de la primera mujer de mi vida. Llegó el momento de mi niñez donde el público era el espejo y lo divertido era cantar a duo con mi mamá. Mi abuela materna también cantaba en la cocina de su restaurante  bambucos y boleros mientras meneaba las grandes ollas de sopa o tarareaba el tema de su novela Favorita…

No siempre canté, pero descubrí que cuando lo hacía me sanaba y ahora entiendo que me vinculaba con mi madre y mi abuela... Fui temerosa de compartir el canto y me fortalecí para superarlo. Creí en algún momento que era solo para músicos famosos. Pero vi a las cantaoras de los pueblos de la costa colombiana y abuelos indígenas  cantando y entendí que todos tenemos ese don y que es una expresión del espíritu. Cuando llego la medicina de la tierra a mi ser, asumí el canto para rememorar, honrar y agradecer al Gran Espíritu por la vida y seguir cantando para sanar.

¡Hoy es un servicio!
Cantamos para orar en el Temazcal, cantamos para parir, cantamos para criar, cantamos para asumir nuestra frecuencia en todos los planos y entrar en la vibración de Dios, Cantamos los mensajes político culturales, cantamos para llevar un mensaje a todos los pueblos de paz, de luz , de Amor
Para las Mujeres de Luna una cantaora más

Saludos de Amor  a toda la familia universal, les abrazo.

Tania Jijón

 "El canto de las mujeres es un espacio sin tiempo donde no existe ego ni lucha de poder, no hay juicios de valor ni importancia personal..."


Yo soy la Tania, Yanaquilla, Luna Nueva, así me he reconocido en el fuego, y soy instrumento de Sanación del Espíritu. Mi camino no esta trazado, lo estoy haciendo, con la certeza de que el misterio de la vida es quien sabe de verdad a donde voy.

Creo que cuando la mujer levanta su voz se manifiesta un aspecto muy poderoso de ella que despierta una memoria antigua que habla de la relación de la mujer con el espíritu del viento, del agua, del fuego y de la tierra.

En este espacio la mujer no conoce fronteras... El canto de las mujeres es un espacio sagrado que vive dentro, que cuando es escuchado y cantado por más de una, se vuelve un rezo de unidad, un rezo de Poder.

La mujer es un ser que nació de un sueño de la madre cósmica, que dio a luz al universo la que tiene la capacidad de engendrarse a ella misma para volver a nacer y poder dar vida infinitamente, entonces cuando la mujer encuentra a través del canto su centro… ella recuerda.

Recuerda su infinita existencia -donde todo condicionamiento social que ha sido impregnado a través del tiempo se transforma- esa capacidad de poder volver a nacer, cuantas veces sean necesarias. con tal de conservar la llama eterna que existe en las profundidades del mar… que es ella.
El canto de las mujeres es un espacio sin tiempo donde no existe ego ni lucha de poder, no hay juicios de valor ni importancia personal, por eso nos sentamos en círculo alrededor de un fuego, porque estamos recordando cómo es la verdadera relación entre mujeres, como siempre fue… Nos estamos reconociendo, nos estamos levantando de alguna manera con nuestra voz.

La luna es la energía femenina que rige los movimientos de la vida del planeta, es el aspecto de la mujer que se manifiesta en los ciclos de fertilidad y de muerte llamados movimientos lunares. Estamos recordando lo que nuestras abuelas nos dejaron inscrito en las estrellas, en el latido del corazón de la madre, en el brillo mismo de la Luna.

El canto de medicina llego a mi vida en los temazcales, desde el primer temazcal al que fui se despertó una memoria antigua de la mujer en mi que canta a la vida. Creo que todas somos la misma, y en este tiempo nos hemos encontrado nuevamente para rehacer el camino, por eso es un tiempo en que a pesar de todo lo que sucede en el mundo, cantando es donde nos damos cuenta de que nos sanamos de verdad y sanamos al planeta. Aquí podemos ofrecer de alguna manera lo mejor que tenemos a quienes amamos porque cuando vibramos en la alegría, y nos escuchamos de verdad podemos mover montañas.

Somos infinitas, invencibles, somos mujeres sagradas, TODAS.

Rosa Orozco



"El canto es el rezo del corazón.."


Nací en Mexico Tenochtitlán. El canto es el rezo del corazón y buscándome, el camino me encontró. Estoy infinitamente agradecida.

Ser mujer es ser semilla.
Mujeres juntas somos un@

Veronica Oquendo


"Expresar al Universo la vibración que está en el fondo de mi corazón..."


Me llamo Vero Huairasisa, soy de las montañas de la mitad del mundo, de Quito, Ecuador. El canto es la expresión con la que puedo ser libre, para expresar al Universo la vibración que está en el fondo de mi corazón, y mi esencia resuene en la profundidad de su infinito.

En mis estudios de sicología me di cuenta de que la felicidad humana va mas allá de la racionalidad, decidí experimentar en mi misma, el verdadero camino de la felicidad y así me encontré con mis abuelas y abuelos que cada día me enseñan nuevas cosas sobre el camino del ser.

Ser mujer es tener la bendición de estar en la vibración de lo femenino en el Universo, juntas debemos redescubrir esta memoria que habita en nuestro cuerpo, y vivir siempre como hermanas.

Luz Herrera



"Ser mujer es tener la posibilidad de entregarse por amor incondicional a la familia universal..."


Nací en México D.F. El canto es una forma de expresión de felicidad, fe, angustia… un modo de conectar con mi ser interior, una manera de alinearme con el Universo, un vehiculo del rezo.
Determinada por mis actividades académicas y mi entorno, básicamente racional; conocía la abuela ayahuasca. A partir de ahí comencé a reconectarme con mi espiritualidad. Desde hace algunos años mi principal trabajo personal es el cultivo de mi ser interior en comunión con las fuerzas de la naturaleza y del Universo.

Ser mujer es encarnar la energía de la hija, la madre y la abuela. Ser mujer es tener la posibilidad de entregarse por amor incondicional a la familia universal. Ser mujer es vibrar en los tonos más suaves, delicados y dulces del Universo.

miércoles, 12 de febrero de 2014

Sandra Esmeralda

"El canto es el rezo con melodía, una conexión interna y externa que se expande y se eleva..."

 

Nací en Zacatecas, México pero decidí mudarme a Guadalajara para estudiar Artes Visuales. Seguí la intuición y mis anhelos, dejé atrás la tristeza y pidiéndole a las estrellas otra oportunidad, la sorpresa fue grande. En el camino encontré la medicina, la danza, el rezo y gente maravillosa que aún sigo conociendo.

Así un día supe de la Tribu Círculo de mujeres, medicina todas y todas sabias, y todas bellas, donde encuentro confianza, el reflejo, la memoria, la unión. Me siento profundamente feliz y agradecida por haberlas conocido porque los sueños también se enlazan y ahora tejemos juntas este sueño.
Me dedico a pintar, hacer esculturas, estenografía y jabón artesanal.

El canto para mi es la vibración que cura-sana el corazón y el alma, es el rezo con melodía, una conexión interna y externa que se expande y se eleva.

Ser mujer es amor y es una bendición poder ser creadora de vida y de la vida. Ser luna es fluir y es estar atenta a nuestras aguas y a las fases, iluminando nuestro pasado y nuestro presente,
Al encontrarlas y sentirlas, mujeres luneras cuando coincidimos en un fuego, es magia pura porque se abre el corazón, la palabra, el canto. Están presentes nuestras abuelas mientras el espíritu de la feminidad se respira, late fuerte y sutil.

Nuestras intenciones se manifiestan al pasar los días y el cancionero es pura hermandad y nuestra herencia.
Gracias

Paulina Oviedo



"Ser mujer es un misterio, sé que es la responsabilidad más grande que nos dieron los dadores de la vida..."


Nací al sur del Ecuador en Cuenca. Me desarrollé en la capital donde encontré a mis ancestros en esta ancestral ciudad. El canto despertó mi manera de conectarme con mi corazón, es el estado de meditación y comunicación directa con el Gran Misterio, es la forma de sanación original, cuando canto, canta mi alma y se regocija de amor, de felicidad, cuando canto soy feliz.

Ser mujer es un misterio, sé que es la responsabilidad más grande que nos dieron los dadores de la vida, ya que en esa cadena de dar vida somos una puerta muy vital para que así sea. El misterio de traer niños al mundo se nos fue entregado y con ello una gran responsabilidad. Amo este trabajo eterno que nos encomendaron y espero hacerlo con mucha entrega, amor y alegría.

Ser mujeres juntas, es la onda, nos identificamos, nos damos cuenta que somos una y que una es todas. Nos apoyamos y nos espejeamos, sin nosotras no podríamos entender el mundo. Gracias mujeres, gracias a mis abuelas, mi madre y todas las hermanas que somos en la tierra.

Milena Villalobos


“Cantar es expandir el amor desde las profundidades del corazón


Nací en México Distrito Federal. El canto es una manera de expandir el amor desde las profundidades del corazón y compartir sentimientos de diferentes tonalidades y vibraciones. Los cantos son una manera de transmitir sabiduría y enseñanza directa de voz en voz, una celebración hacia la vida ante la vida misma y todo lo q comprende.

Decidí ser mujer, un camino hermoso, lleno de aventuras con caídas altas y subidas veloces. Las estrellas me lo platicaron "Vivirás el amor incondicional a flor de piel, con la consigna de expandirlo a todos los seres, las partículas, movimientos de energía. Si tú quieres aprenderás a realizarte en el amor, aunque el camino este acompañado de pruebas… buenas pruebas que ayudan a destruir el ego.... Es muy sabio este camino, ya verás". Así emprendí un viaje hacia la aventura más intrépida. Indudablemente vivo el amor incondicional q deseo expandir en mis acciones, pensamientos y palabras.

Ser mujer para mi es encarnar en el amor la sabiduría y en él, su valor....

Gracias madre tierra soy una hija muy afortunada

Karenina Casarín

"Ser mujer es una oportunidad para colorear en este mundo la sutileza de la re-evolución..."


Nací en el valle de Atemaxac en la ciudad de Guadalajara Jalisco, México. El canto es la medicina del corazón, el destello desde nuestro propio ser físico para sanarnos y sanar... para mi ha sido la herramienta mas sutil, bella y profunda para con-centrar mi caminar por la medicina y lo sagrado de la vida.

El camino me encontró con ganas de expresar desde mi voz lo que sentía, lo que vivía, lo que me retaba, lo que me hacía crecer, ya fuera placentero o doloroso. Me miró desde pequeña cuando cantaba y bailaba sintiendo la libertad del cuerpo hasta que el camino rojo enfocó mi sanar desde adentro.
Ser mujer es una oportunidad para colorear en este mundo la sutileza de la re-evolución, para comprender el equilibrio entre seres humanos diversos y no entre géneros mujer-hombre...
Ser mujer es un hermoso reto que cargo en esta vida para recordar lo que el amor puro engendrar desde mi propio ser.
Ser mujeres juntas es una bendición colectiva para el mundo, nosotras mismas y todas nuestras relaciones.

Mariana Olcese

"La belleza del alma manifestada..."




Nací en Lima, Perú. El canto es el rezo directo del corazón, es la belleza del alma manifestada en vibración creadora. Ser mujer es ser la creadora, dadora de vida de los sueños de los corazones.

Nolga Rodríguez

 "Todas somos una aunque con particularidades..."


Nací en Cuba. Para mi el canto es una forma de rezar, comunicarse con los espíritus y entrar en otros mundos. Choque con el camino a través de mi Pauli (mi hija) y seguí porque encontré afinidad con mis sentimientos y forma de ver el mundo aunque siento mucho que fue en una edad algo avanzada.
Ser mujer es lo más hermoso de la tierra el tener la bendición de llevar un ser vivo dentro y después alimentarlo, verlo crecer es lo más maravilloso de la existencia. Todas somos una aunque con diferentes particularidades.

martes, 11 de febrero de 2014

Yasuní Rocío



"Siempre cuando niña, subida al columpio, ¡a todo vuelo! le cante al cielo, a las nubes y a las montañas…"


Soy Yasuni, como el gran río amazónico que algún día nació de una gota de rocío.
Rocío, como el nombre de mi madre que a su vez broto de mama Tungurahua donde mi abuela Enma labraba la tierra.
Desde siempre cante. Los cantos alegran el corazón y llenan de fuerza el espíritu. El canto es el medio que encontré para dar a luz a mi hija Ashkai, aprendí que es posible cantar con mi vagina, respirar con ella y conectarla con mi boca a través del sonido, con el constante trabajo de activar y concientizar mi canal de dos bocas.

Soy Mujer, he dado fruto a la vida y la he criado y cuidado, la he danzado y contado, la he cantado y lo sigo haciendo… seguiré en esta misión hasta que la muerte me sonría, el arte es mi camino, canalizo lo que soy para interiorizar y exteriorizar lo que aprendo cada vez.

El canto y el cuento son sanación espiritual y científicamente explicado y comprobado.
¡Somos mujeres que nunca dejaremos de contar y cantar a nuestros niños! Somos mujeres que nunca dejaremos de serlo y despertar en el otro la feminidad, que devolverá el equilibrio a la existencia de la humanidad!

Brenda Itzel Ángeles Galicia


"El canto es la forma en donde puedes tocar corazones en una sintonía sanadora..."


Soy el amor, soy el sueño de mis ancestras, soy la continuidad de esta bella danza que es la vida y a través de ella voy rezando que esta misma siga... Soy madre, hija, hermana, soy hermosa mujer, somos una en todas y así en este hermoso circulo nos reconocemos y vamos recordando lo que nuestros mayores nos han enseñado: AMOR

El nombre que me han dado es Brenda Itzel Ángeles Galicia y así, agradecida con mis padres y con todo lo que se manifestó y acomodó para haber nacido en la hermosa Tenochtitlán, mis pasitos comenzaron en esta tierra mexica, de aquí vengo...
Lo que hago es crear bellas cosas, que a través de mis sueños y emociones van llegando para que mis manitas las lleven a manifestarse en materia, voy andando en este caminito, cantando, caminando, contando la belleza que me comparten mis maestras y maestros, pero sobre todo aprendiendo...
El canto para mi es el poder que nace para poder transmitir belleza, sanación y amor, es la forma en donde puedes tocar corazones en una sintonía sanadora, creo que la vida sería más hermosa si nuestros rezos realmente  se elevaran con la puritita melodía del corazón porque así, lo que hablamos seria tan verdadero y hermoso que saldría como un canto, como muchas de nuestras lenguas madre. Sólo falta afinar y escuchar la melodía...
El canto como mujeres es el poder que se levanta con nuestros úteros; es vibración con la que puedes llegar hasta los lugarcitos mas increíbles; es el llamado hacia quienes más nos quieren y hacia quienes invocamos.
Recordemos que todo es bellamente humilde, ya que al convertirnos en instrumento abriendo el corazón todo canto es hermoso, cada una con su medicina, siendo en ese momento lo que pasa a través de nosotras para ser bella vibración, para ser hermosa y dulce medicina, es la forma de unir corazones y sincronizarlos.

Ser mujer es una bendición y lo es más aprendiendo a vernos en la dualidad. De nosotras viene la creación, desde nuestro útero, nuestra sonrisa, las bellas miradas, la buena palabra, desde los corazones y nuestra sorprendente cabecita. Somos parteras de nuestras creaciones, no sólo con la bendición humana de ser madres sino que parimos mucho mas que nace a través de nosotras. La mágica creación que como hijo o hija comparte nuestro corazón, tan perfecto compañero de nuestros compañeros, nuestras relaciones. Una vez que vamos entendiendo nuestro poder vamos aligerando situaciones, vamos valorando las diferentes medicinas y compartiendo esa bella medicina... de ser mujer ...
Cuando nos juntamos y realmente entramos en el corazón de nuestras hermanas somos unidad, somos bellas melodías y nos volvemos una, regresamos a la raíz a nuestra Madre. 

Senka tlasojkamati... ometeotl...

lunes, 10 de febrero de 2014

Cristina Circo



“Ser mujer es un don y serlo juntas es la realización de un sueño”


Nací en Catania, en la hermosa isla de Sicilia, Italia, al lado del volcán abuela Etna que dona fuerza, energía y calidez propia de la gente de ahí que rodeados por mares se contagian del espíritu de soñadores, poco melancólicos, y aventureros.
Encontré el camino de repente como una petición que sin saber exactamente qué, el espíritu me respondió así. Gracias a Santiago Andrade, ese hombre al que su corazón lo llevo’ desde el otro lado del océano hasta mi ciudad para abrir una puerta y sembrar el camino de la medicina en un lugar tan lejano donde nos encontró, en un pueblo de gente con muchísimas ganas de aprender, de conocer, de sanar…
El canto para mí es alegría, sanación, es la posibilidad de invocar al espíritu y de rezar, es una manera de agradecer, es expresarse con el corazón y desde el corazón, es compartir y crear. Recuerdo la primera vez que llegué a la Danza del Sol, todo era nuevo para mi y trataba de ver y sentir cuál podía ser mi lugar -en ese momento- para apoyar y colaborar en el rezo. Así de fluidomis pasos me llevaron hacia esos latidos, esos cantos y esa vibración que se elevaban desde la cabaña del tambor. Sentí que ese era mi lugar, me acoplé en seguida y fue muy fácil. Bonito ver como mas allá de los limites que uno mismo cree tener, todo se mueve de la mejor manera para sostener el largo rezo de 4 días de Danza del sol y 4 noches de Danza de la Estrella. Después de todo sentí que había pasado por un proceso y a través del canto recibí mucha sanación y liberación….y así sigue siendo… 
 
Ser mujer es un don para mi y ser mujer juntas es la realización de un sueño, es poder, fuerza y fortaleza, es una gran oportunidad, la posibilidad de crear la realidad desde una nueva mirada, desde una nueva visión, con voz nuevas y un sonido renovador. Bajo cierto sentido es también un desafío. En total es pura hermosura, belleza y corazón latiendo desde la vibración de la energía femenina despertándose en todos lo seres. Agradezco todas mis hermanas con las que he vivido, sentido, compartido, cantado, soñado, reído y llorado; agradezco el cariño, el afecto y la complicidad…Gracias por toda esta lindura y que sigamos adelante hasta el infinito y más allá…Aho’ metakuye oyasin

María Augusta Almeida Ferri


 

"El canto se eleva desde el corazón y es mágico rezar cantando, sanar cantando, cantar al agua."


Soy mujer andina del ecuador, fragmento de mi Padre y Madre, fuente de amor infinita. Tengo 2 hermanas y 1 hermano. Me gusta trabajar con mapas y a veces con números. He trabajado mucho en el campo, con seres humanos de humildad impecable, muy agradecida por esto.
Amo, respeto y honro a la Madre Naturaleza con toda mi alma. Caminar en el páramo y coquetear con los glaciares es de mis cosas favoritas, a esas alturas el pasar de las nubes es casi como volar. Cuando camino, y me gusta algo, me tomo el tiempo para tomar una foto, respirar desde lo más hondo y agradecer por la vida sagrada. Siento que los paisajes al igual que el canto recargan el alma.

Pintura de María Augusta
El canto se eleva desde el corazón y es mágico rezar cantando, sanar cantando, cantar al agua. Es mi forma de reconocer mi relación con el agua, mi agua y así el agua de madre y abuela, soy todas a la vez y soy amor, soy hermosa mujer.
Encontré a mis hermanas de luna y a los cantos porque así tenía que ser, somos todo un hermoso diseño de sueño, de muchos milagros al primer despertar, sentir la amorosa presencia de lo divino en cada respirar. Vivo en amor, abundancia y siempre comparto sonrisas. Soy eso en resumen, estoy segura que hoy puedo ser mejor. Gracias hermanas, son pura luz en mi camino. Nos amo.



Ana Paula González


“Me descubrí de frente a mi corazón -al principio tenia miedo de abrirse- y con el canto como llave, me abrió a experimentar su gran poder que ejerce sobre todos los seres”.


Nací en Guadalajara, Jalisco, México. Sé que vengo de mas lejos y mi edad no se cuenta con los años sino con la experiencia de un tiempo sin medida, el cual apenas vengo recordando.

Estudié arquitectura y eso me abrió la puerta a cuestionarme muchas cosas sobre el modo en que estaba viviendo. En un viaje a Palenque, Chiapas descubrí la arquitectura maya donde inició un viaje que aun no termina, un viaje hacia lo misterioso, lo grandioso donde el espacio-tiempo se convierte en la nave que me llevó a encontrarme con mi propio misterio y su relación con la naturaleza.
En ese mismo viaje tuve mi primer experiencia de temazcal el cual ha sido una bendición y una gran herramienta en mi vida. Con esta “casa de vapor” temaz-calli llegó la medicina del canto y los elementos. Aprendí una nueva forma de mirarme y entender lo que somos. El camino ha sido muy hermoso re-encontrándome con mucha familia, la familia de las estrellas, de las tribus, de los reinos, de los caminantes, de los buscadores, de los abuelos. Me descubrí de frente a mi corazón -al principio tenia miedo de abrirse- y con el canto como llave me abrió a experimentar su gran poder que ejerce sobre todos los seres. Su vibración, su proyección del ahora donde se que puede alcanzar lo inalcanzable, lo lejano, lo obscuro y lo brillante.
El canto es una fuente de vida y creación, de nutrición, de salud, por medio del canto nos abrazamos, nos conectamos con nuestra esencia y de ahí con todas las esencias, con todos los espíritus visibles e invisibles, es el canal por el que puede hablar el alma.
SER MUJER es ser mar, ser luna, ser agua viva que se mueve, que fluye, que recorre los rincones, que busca, que limpia, que ama, que nutre, que sana. Ser mujer es ser madre también y ser madre es ser una maga, una estrella que puede iluminar la noche, es el vacío que contiene la vida y ese vacío es profundo, es hondo como el mar a veces te pierde y te duele, pero te hace crecer y ser fuerte, te hace SER, te nutre para poder nutrir los hijos, los sueños, los proyectos....
Ser MUJERES JUNTAS es ser el tejido que envuelve, que cobija, que guía, inspira y crea. Los círculos de mujeres son la máxima fuerza y poder, sabiduría, confianza, certeza y belleza, es espejo divino del cosmos, vibrante, lleno de vida...tejedoras de sueños, hermandad, UNIDAD

domingo, 9 de febrero de 2014

Sol Palacios



"Con el canto puedo mostrar mucho más allá de cualquier imagen o palabra lo que soy..."


 
Nací el 23 de febrero de 1995 en Cuenca, Ecuador. El canto es la puerta que me abrió el camino y la forma por la cual el rezo en mi se ha concretado para caminar. Desde que era niña comencé a ir a ceremonias de medicina, temascales, búsquedas de visión y danzas con mi mamá, pero cuando decidí comenzar a apoyar las danzas con mi voz, la visión se aclaró. Pude reconocer la medicina del tambor, del canto, mi propia medicina y así sentir la medicina del misterio. El cantar es poner mi corazón y mi espíritu en algo que puedo sentir, es conectarme con la esencia del universo, con la vibración del agua, del sol, del aire, de la tierra, de mi origen y así reconocerme parte de toda esa conexión. Con el canto puedo mostrar mucho más allá de cualquier imagen o palabra lo que soy, lo que llevo en mi camino, lo que tengo para ofrecer en la vida como mujer y como soñadora.

sábado, 8 de febrero de 2014

María Eloisa Lara




“El canto es quien guía mi camino, donde suena la música, allá siguen mis pasos”


Nací en la ciudad de los crepúsculos, la capital musical de Venezuela, Barquisimeto. Ahí, a los niños se les enseña a tocar “el cuatro” cuando van a la escuela. Mi abuela cantaba al amanecer para despertar a la familia entonando con amor y dulzura mientras hacía las arepas matutinas.
Soy Mariló, KiyaWasi, hija, hermana, prima, madre, amiga de un montón de mujeres que cantan para ser felices.

Soy cantora por naturaleza. El canto es quien guía mi camino, donde suena la música, allá siguen mis pasos. Canto para rezar, canto para agradecer, canto para alegrarme, canto para ser yo. Me gusta caminar por la selva donde vivo ahora, con una harmónica y un tambor, cantando, haciendo música, danzando.

viernes, 7 de febrero de 2014

Nadia Ávila Salazar




Asombrada por los guardianes de montes y ríos encontré en el canto una forma de oración pura”


Nací en Guadalajara Jalisco en 1985, un año en que la energía de la Tierra se manifestó con fuerza en mi país, mostrando su poder dual de creación y destrucción en un terremoto. Hija de una madre amorosa y un padre que me enseñó a amar la Tierra. Crecí en la región de los valles de Jalisco, cerca del Cerro de Tequila, del bosque y de las estructuras escalonadas Guachimontones.
Asombrada por los guardianes montes y ríos que rodeaban a mi pueblo, encontré en el canto una forma de oración pura, una manera de agradecer la belleza que mis ojos miraban, y una forma de encontrar la voz de mi espíritu. Cuando me descubrí mujer tenía 11 años, y mi animal favorito en ese entonces era la mariposa, así, entendí mi transformación y con amor he caminado hacia la mujer que ahora soy, caminando con el valle donde crecí, con los cerros y con sus habitantes, caminando con mis mujeres ancestros, con la intención de honrarlos, honrar a la vida y honrar a la Tierra.

jueves, 6 de febrero de 2014

Carolina María Molinari

 

El canto es la forma mas natural de expresar lo que siento”


Nací en Bahía Blanca, Argentina. Fui bautizada por la tradición purépecha con el nombre de “Chupacatra Kutzu” que significa arco-iris de luna.

Ser mujer es increíblemente maravilloso porque siempre llenas de amor, fuerza, tolerancia, y con el don único de ser portadoras de vida, de ofrenda agradezco con mis tres bellos hijos y a mi compañero de vida por ser madre.

El canto para mi, es la forma mas natural de expresar lo que siento. Me encanta cantar, me libera y lo hago todo el tiempo. Lo disfruto mucho junto con amigos y familia. Gracias a todas por este bello trabajo que estamos haciendo.

miércoles, 5 de febrero de 2014

Julia Volpe

 

Ser mujer es una poesía, es una marea, es un ciclo. Es ser un gran círculo de sanación, de armonía y alegría. Es una bella danza a la Vida, y las mujeres juntas somos hermosas.” 


Nací en Barcelona, España. La voz es el primer instrumento que hemos recibido para crecer y el canto es la manifestación del alma, es el regalo que le hacemos a la creación para agradecerle nuestra existencia.
El Camino Rojo, me encontró en la mano de un buen amigo que me invitó a renacer en u
n temazcal, hace más de 10 años. La comunidad del fuego de Iztachilatlán en Urcupacha y la Búsqueda de Visión me llamaron al viajar por la costa de Ecuador. Llegué al sitio sincrónicamente, en la 2a reunión de Mujeres Medicina de América y mi luna sangrante llego a mi cuerpo. Estuve con mi Lunita esos 4 días que duró el encuentro y ahí conocí a Paulina Oviedo quien a convocado a la mayoría de las mujeres.
Ser mujer es una poesía, es una marea, es un ciclo... es ser Luna y amar al Sol. Es ser Hija, Madre, Abuela... Es ser Tierra... es ser Agua... Es ser Amor. Es ser un gran círculo de sanación, de armonía y alegría. Es una bella danza a la Vida, y las mujeres juntas somos hermosas.

martes, 4 de febrero de 2014

Gaby


"Con mis hermanas he aprendido  que la voz no es lo principal sino el corazón que se le pone".

 

Gabriela Loreto
Nací en Guadalajara, viví mi juventud en Francia donde el espíritu no se cultiva. Me encontré con Él, aquí en México -una vez de regreso- y fue lo que hizo que mi vida, se volviera mucho más ligera y con sentido. El canto siempre me ha encantado mas no he podido liberarme de lo aprendido: -cantas muy mal-, -tu no estas hecha para cantar-, etc. Con mis hermanas he aprendido  que la voz no es lo principal sino el corazón que se le pone. Otra puerta más para mi felicidad.

El camino me encontró en Guadalajara con los hermanos Ochoa y de ahí para adelante siempre he estado en él, de cerca o de más lejos pero esa semilla ya la traigo dentro de mi. Fue cuando supe lo que era la hermandad.

Y así, leyendo me encontré con lo que son los círculos de mujeres que con esa inquietud formamos uno en San Pancho, Nayarit hace 12 años. Han ido y venido hermanas de diferentes colores, sabores y olores pero gracias a la Diosa, el núcleo se formó y cada luna nos hacemos presentes en el altar. 

La comunión con mis hermanas me ha traído mucho eje y fuerza pues compartiendo y escuchando su visión me he vuelto mas sabia al interior de mi propio templo.  Ahora sé que  esto es una espiral por donde todas transitamos, a veces arriba a veces abajo pero en el mismo circulo. He visto el cambio en ellas, he sido testigo de su crecimiento. He sido copartícipe de sus locuras y ganas de libertad. Creo que sin ellas, sin el rezo y sin el canto me hubiera costado mucho mas trabajo desarrollar mi ser , profundizar en mi.

domingo, 2 de febrero de 2014

Tanya


“Ser mujer es, ser  La Creadora. Tener el poder y la responsabilidad de transformar la realidad que nos rodea con nuestro amor, con nuestra voluntad. Somos el canto de la fuerza que trasciende el dolor para hacer vida.”


Tanya Sánchez Ribadeneira
Nací en Quito Ecuador. Caminando conocí este sueño, cuando al celebrar mis 21 años fui invitada a una ceremonia en casa de “Pie Grande” un hombre medicina, y además de un gran cantor. Desde ese día sentí el deseo de caminar cantando, consagrando mi arte al Gran Espíritu. Que el trabajo que hago como actriz, como payasa, como cirquera, música, sea realmente una forma de tender un puente entre el cielo y la tierra, de ser artífice de una bella realidad.

Ser mujer es, ser  La Creadora. Tener el poder y la responsabilidad de transformar la realidad que nos rodea con nuestro amor, con nuestra voluntad. Somos la salud de nuestra familia, el orden, la armonía. Somos la dulzura que puede adormecer y puede sanar a un niño cantando.

Somos el canto de la fuerza que trasciende el dolor para hacer vida. Es la melodía del corazón, es un grito, un llanto dulcificado, el  primer sonido, el primer lenguaje del ser, cuando no había otra manera de vivir que no sea arte. Es  la vibración misma del amor, de la creación. Es una bella forma de dar amor a nuestros hijos, a nuestros hermanos, de hablarle al gran espíritu, de invocar la memoria de nuestras abuelas, nuestras plantas y dejar que ellas nos canten y nos enseñen  a través de nuestra voz.

Es contento, risa y agüita que fluye en la palabra, en la canción. Es una fuerza poderosa, activa, dinámica. 


sábado, 1 de febrero de 2014

Amalia


"Cantar es una forma de honrar la vida, de agradecer lo que los dadores nos entregan todos los días. Es una forma de sobrevivir a todo lo que creemos real en las ciudades y que a veces nuestro corazón intuye que no es verdadero


Amalia Oviedo
Rodríguez






Quién soy? Soy la que soy…. 
una y todas al mismo tiempo, 
arlequín de la luna que
cambia su cara con cada marea….










Soy Amalia, nací en la bella isla de Cuba en 1979, glorioso tiempo de sueños y revoluciones y llegue a Ecuador -la tierra de mi padre- cuando tenía dos años. Aquí aprendí la belleza de vivir en un país pequeñito lleno de todo: de buen clima, de comida, lleno de gente buena y alegre hasta en las montañas más altas, y a veces melancólica como los  Albazos, San Juanitos y los Pasillos.

Me vinculé con el trabajo espiritual a los 24 años y mi hija Antonio ya había nacido. Aquel, fue un día que no voy a olvidar cuando la medicina me exigió que subiera a la montaña. Yo me creía débil e incapaz de sostener la sed pero me visioné quitándole el agua a mi  hija y dejando que mueriera de sed para yo satisfacer la mía. Ahí supe que debía subir y aprender a contener la sed por si algún día hacía falta.

Desde entonces hago un gran esfuerzo por seguir creciendo. Soy Buscadora de Visión, cargadora de chanupa, corredora de temazcal, danzante del Sol y sobre todo una amante de esta tierra y de las medicinas que ella produce, respetuosa siempre de los saberes ancestrales y quienes los custodian.
La medicina me enseñó a cantar, me mostró mi voz y mis sueños, me hizo sacar la armonía de mi corazón sin vergüenza, siendo la que soy. 

Me involucré en este proyecto como casi en todas las cosas importantes de mi vida, por pedido de mi hermana Paulina, una visionaria que me sembró en el corazón la idea de aprender a cantar y desde entonces estoy en ese hermoso aprendizaje.