::... Honramos a las generaciones y vivimos el contacto con la memoria antigua de nuestros pueblos ...::

martes, 21 de abril de 2015

Fractales de luna roja son sembrados

Devolviendo la memoria, que estuvo enterrada 
en una historia que no nos corresponde.
Despierta, concluye el ciclo que un día 
la madre empezó en el interior.

Luna roja, cíclica, sagrada vuelve a las entrañas de la tierra nutriendo de vida a la vida
Sangre roja, cristalina empapa al mundo de tu amor, entra y enraíza la tierra con tus gotas consientes, vibrantes.
Sangre de luz, despierta ya, despierta la memoria.
Luz, vida, verdad, despierta ya...

Pintura: Martha Elizabeth Mary (Inglaterra)
Decreto que mi sangre es amor por la vida sin pasar por la basura, 
sin ser confundida con el mal estar o la enfermedad, 
mi sangre es salud, sangre es la puerta a la vida para la humanidad y como tal honra la muerte, puerta eterna de la vida, en ella está el misterio, somos guardianas de secretos que se encuentran a la vista de todos y por ser tan simples se dificulta el camino para comprender.
Muerte gran enseñanza de la sangre, te honramos y agradecemos la vida eres la única que tiene asegurada su ganancia, por ello te pedimos por los que han estado, por los que estamos y por los que vendrán.

Estamos conscientes de tu existir, espíritu curandero, ahora decretamos tu compañía como una gran consejera, así te reconocemos dama roja, dama creadora de vida, dama cíclica, estamos en ti y agradecemos vivir en ti cada 28 días, reconocemos tu poder y pedimos tu instrucción, para re alinear el destino de nuestra humanidad, en el camino de tu luz.

Mujer de mujer, de sangre roja, todas las que somos danzaremos al ritmo del latir del tambor, abuelas, madres, hijas y nietas danzaremos invocando el equilibrio de las aguas rojas con las aguas de los cielos, de las cascadas volviendo al equilibrio natural de nuestras energías que en ebullición son tu creación,
Una sola visión.

Texto: Paulina Oviedo

martes, 14 de abril de 2015

Sangre

Foto: las diversas Venus
Te honro sangre de luna,
sangre de conocimiento,
sangre de misterio,
sangre de vida,
sangre de muerte.

Poder de muerte cíclica que te liberas y me liberas contigo.
Sangre que brotas de mi sagrado útero buscando el camino hacia la tierra
enseñándome el camino de la transformación de la materia.
Sangre que me muestras el sitio donde mi cuerpo, algún día,
se transformará en alimento para la nueva vida.
Poder de vida que me contraes y expandes.

Sangre que alimentas las semillas que transportará el viento
enseñándome que no existen fronteras.

Sangre de vida de mi hija,
sangre de vida de mis hijos,
sangre de vida de mis nietos.
Sangre que mantienes la memoria viva de mis ancestras,
te honro y te respeto.

Sangre que recorres mi cuerpo y contienes mi esencia,
sangre que cada 28 días llevas mi verdadera voz a mi pachamama.
A ti, que le hablas de mis dolores, de mi penas y alegrías,
de mis errores y de mis aciertos,
de mis sueños y de mis metas...
A ti ,sangre de mis entrañas,
te doy las gracias.
Foto cortesía circulo Sicilia.
DECRETO MI LIBERTAD Y LA LIBERTAD DE TODAS LAS MUJERES A DEVOLVER SU SANGRE MENSTRUAL A LA TIERRA EN CADA LUNA.

Desobedeciendo la voz de un patriarcado cruel e ignorante.
Rezando en cada gota de mi sangre para que se una a la sangre de mis hermanas, fortaleciendo y alimentando la red de vida que mantiene la tierra en paz y armonía.
Decreto que conecto mi vida, mi esencia, a la Gran Madre Tierra, oponiéndome a conectar mi sangre con la basura humana.

Decreto la libertad y deber de todas las mujeres
de despertar y liberarse de esquemas represivos y dominantes,
que nos alejan de nuestra verdadera esencia femenina.

Decreto la libertad de alzar mi voz a los 4 vientos y decir
¡Es tiempo ya!

ESTE ES EL TIEMPO DE ESCUCHAR NUEVAMENTE A LA TIERRA
QUE PIDE SANGRE PARA NUTRIRSE, Y QUE "SÓLO"
ES LA SANGRE DE NUESTRAS LUNAS
LA QUE DEBE REGARSE SOBRE ELLA.

Texto: Sayri - Iris. Terapeuta de medicina holística, madre y sanadora. 

Foto: Juan Esteban Iturralde
Espejo de obsidiana

martes, 7 de abril de 2015

De las diferencias entre fumar y rezar [Parte 2 y última]

Fumar, como he tratado de describirlo, es todo lo contrario. Recuerdo cuando estaba haciendo mi tesis doctoral sobre la imagen de la mujer que construía la publicidad en sus inicios, que en los anuncios de Pielroja de la revista femenina Letras y encajes (Medellín, 1926-1959) se evidencia el quiebre entre el canon de mujer tradicional heredera de los valores de la colonización católica española: casada, con hijos, sometida al esposo, callada, ajena al espacio público dominado por el hombre, dependiente económicamente y representada legalmente por su esposo, padre o hermano. 

Ese canon contrastó con el que se empezó a construir en la modernidad europea y norteamericana, que llegó a Latinoamérica desde finales del siglo XIX a y Colombia en la primera mitad del siglo XX: puede ser soltera, sin hijos, ser líder en la comunidad como maestra, secretaria, empleada pública, artista o literata, oficios que le permitieron salir a la luz pública, firmar sus textos, escribir sus revistas, tener sus empresas, bienes y dinero; votar y ser elegida para cargos públicos, tomar conciencia y ser activista de derechos humanos, de la mujer, de los niños. Puede ser sensual, esta mujer moderna, con faldas cortas, pantalones, cabello corto, zapatos de tacón alto.

La iconografía de los cigarrillos Pielroja comienza, entonces, a mostrar estas mujeres sensuales, cuyo símbolo de libertad y empoderamiento es el cigarrillo en su mano, su paquete en el bolso, los accesorios lujosos como pipas tipo pitillo, los encendedores de plata con incrustaciones de nácar y piedras preciosas, los ceniceros y las cigarreras. Objetos funcionales que, a su manera, ya usaban los indígenas de la ancestralidad americana, también lujosos, también símbolos de estatus. Pero lo que la modernidad no trajo de esa relación con el tabaco fue esa conexión, ese servicio, ese espíritu, esa marca de lo colectivo que separa al tabaco del cigarrillo.
Pintura: Chandra Esmeralda (México)

Cuando escribí mi tesis, lo poco que escribí de ella, no tenía en cuenta esto que hoy cuento, porque no sabía. Tenía información y conocimiento, pero no practicaba el levantar el tabaco, no tenía la conciencia, mucho menos la sabiduría. Esta llega con los años, con el meditar, con el trabajo del símbolo en el inconsciente, con la vivencia, con la experiencia. La experiencia es el pathos, la pasión que se conecta con el conocimiento y el entendimiento, vividos entonces en la emoción y en la carne; cuando algo atraviesa el cuerpo se vive una pequeña muerte, algo fallece, para que algo cambie, para que se renueve la vida.

Ese humo de cigarrillo que antes aspiraba, para sentirlo mío, para no sentirme sola, para sentirme llena y acompañada, ya sé que con el tabaco no se queda en la boca y los pulmones, ni en el cabello o la ropa, sino que ha de subir al Cielo, para llevarse nuestros agradecimientos y plegarias; ha de bajar a la Tierra, como muestra de amor a la Pacha Mama; ha de recorrer las otras seis direcciones (en el caso de las mujeres), en un gesto y vivencia de la conexión, del servicio y la vida espiritual ancestral que hemos decidido caminar.

Hace días, volviendo a compartir espacios colectivos de recuperación de memorias nativas de nuestra América, sentía y pensaba que si quiero cantar mejor, si quiero caminar montañas y valles peregrinando, si quiero seguirme curando y apoyar a otros, he de dejar de fumar. Además, como amo la vida, respeto la vida y defiendo la vida, hoy decidí dejar de fumar, pues me hice una prueba de embarazo y dio positiva.


Texto hecho por Diotima Ra: Nacida en Colombia. Mujer en sus 30, seguidora de tradiciones ancestrales de América desde hace 4 años. Sensible a los saberes sobre la luna de la mujer, uso copa lunar y siembro mi luna desde hace 3 años; ahora, gestante, hago pagamentos a Dachiname (Madre Tierra), según me han enseñado padrinos mexicas, muiscas, emberas y arhuacos.