Devolviendo la memoria, que estuvo enterrada
en una historia que no nos corresponde.
Despierta, concluye el ciclo que un día
Despierta, concluye el ciclo que un día
la madre empezó en el interior.
Luna roja, cíclica, sagrada vuelve a las entrañas de la tierra nutriendo de vida a la vida
Sangre roja, cristalina empapa al mundo de tu amor, entra y enraíza la tierra con tus gotas consientes, vibrantes.
Sangre de luz, despierta ya, despierta la memoria.
Luz, vida, verdad, despierta ya...
Pintura: Martha Elizabeth Mary (Inglaterra) |
Decreto que mi sangre es amor por la vida sin pasar por la basura,
sin ser confundida con el mal estar o la enfermedad,
mi sangre es salud, sangre es la puerta a la vida para la humanidad y como tal honra la muerte, puerta eterna de la vida, en ella está el misterio, somos guardianas de secretos que se encuentran a la vista de todos y por ser tan simples se dificulta el camino para comprender.
Muerte gran enseñanza de la sangre, te honramos y agradecemos la vida eres la única que tiene asegurada su ganancia, por ello te pedimos por los que han estado, por los que estamos y por los que vendrán.
Muerte gran enseñanza de la sangre, te honramos y agradecemos la vida eres la única que tiene asegurada su ganancia, por ello te pedimos por los que han estado, por los que estamos y por los que vendrán.
Estamos conscientes de tu existir, espíritu curandero, ahora decretamos tu compañía como una gran consejera, así te reconocemos dama roja, dama creadora de vida, dama cíclica, estamos en ti y agradecemos vivir en ti cada 28 días, reconocemos tu poder y pedimos tu instrucción, para re alinear el destino de nuestra humanidad, en el camino de tu luz.
Mujer de mujer, de sangre roja, todas las que somos danzaremos al ritmo del latir del tambor, abuelas, madres, hijas y nietas danzaremos invocando el equilibrio de las aguas rojas con las aguas de los cielos, de las cascadas volviendo al equilibrio natural de nuestras energías que en ebullición son tu creación,
Texto: Paulina Oviedo